No es ningún secreto que en el ciclocross no hay favoritos fuera del circuito y sólo los más fuertes sobreviven. Y si hablamos de bicicletas, esto es aún más cierto. Por eso la CruX Elite X1 fue diseñada para ofrecer eficiencia a la disciplina.
Para la fabricación del cuadro hemos aplicado la tecnología Rider-First Engineered™, que utilizamos por primera vez con la Tarmac. El tamaño de los tubos y las capas de carbono se adaptan a cada una de las tallas, con esto conseguimos que las características de la CruX se mantegan en cada talla. Y no solo esto, también hemos reducido significativamente el peso del cuadro, ahora una CruX en talla 56 tiene un peso de 900 gr. aproximadamente, reduciendo así en 400 gr. el peso del cuadro anterior. Pero un cuadro ligero y rígido por si solo no es suficiente para una carrera de ciclocross, es por esto que la nueva CruX combina rigidez y elasticidad a la perfección. Para conseguir esto último, bajamos el cierre de la tija dos centímetros con lo que dejamos la tija más expuesta y por lo tanto absorbe mejor los impactos.
También sabemos que las carreras de ciclocross muchas veces se ganan en las curvas y en las barrera y esto lo hemos tenido en cuenta en la geometría de la CruX. El tubo superior ha sido diseñado con una forma específica para coger la bici más cómodamente y subirla al hombro en un suspiro, ya que tiene el fondo plano y presenta una gran apertura en el triángulo frontal.
Es impresonante tener una bicicleta muy ligera, pero esto no sirve de nada cuando la bicicleta está cubierta por 5 kg. de barro. Pensando en condiciones extremas de barro, hemos dejado ocho milímetros de holgura para un neumático de 33 mm.
La CruX Elite X1 viene equipada con unos componentes pensados para las carreras, grupo SRAM Rival 1, unas ruedas ligueras y resistentes como son las Roval SLX 24 y neumáticos 2Bliss Ready.